Debemos aprender a amarnos de verdad
como seres humanos,
perdonarnos
aceptarnos
acoplarnos a nuestras diferencias
los unos con los otros.
Pedirle a Dios
que nos permita descontaminarnos
de las amarguras
del odio
de todo aquello
que se transforma en oprobio.
Que nos aleje de la injusticia
de las malas horas
de los problemas con dilemas
y los infortunios con emblemas.
Pidamos al Rey del universo
que nos cobije con su santo manto
y nos continúe protegiendo
induciendo
a seguir haciendo el bien
sin mirar a quién.
Ser lumbrera para nuestros hermanos
cobijándonos en ayuda mutua
haciendo equipo
en cuidar el planeta
sin pretender riquezas que exageran.
Hagamos de esta estancia
una felicidad de infancia
dejando el cuidado al Gran Padre
que todo lo puede
todo lo mira
nada descuida.
Acudamos a su amor
contagiémonos de su pudor
no permitamos mas dolor
dejémonos llevar por su pasión.
Su gozo es puro
y su intención
nos permite amarlo
con valor.
Él nos trae paz
nos hizo capaz
es cuestión de esperar
falta poco
inclinémonos ante su Altar.
HELIOS MAR
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