A mi primo Reinaldito - 28 de febrero de 2012 – Hora: 2:30 a.m.
Hermano del alma
extraño mucho que ya no estés aquí,
todos los días te llevo en mi mente
y nunca dejará de ser así;
recuerda que: Te amaré por siempre
y mis lágrimas recurrirán al son de tus recuerdos
impregnados en mi mente.
Bellos y elocuentes instantes
vividos en niñez y adolescencia febril,
cargados de muchedumbres y fantasías,
locuras y ensueños,
travesuras de pequeños,
bailoteos y festines que endulzaron nuestro andariego recorrido,
logramos desahogarnos gritando al unísono
y atrevernos siempre a lo maravilloso e imposible.
Tú lo hacías todo fácil y entretenido
esa carcajada melodiosa que ahuyentaba tristezas, rabietas, amarguras y desesperanzas,
tu hermano del alma, tu lo hacías aún más así.
Aún apego en mi cinta magnética
cada uno, uno a uno de todos esos bellos recuerdos,
adornados de tu bien dibujada sonrisa que enmarcaba cada cuadro de nuestra extensa familia,
esa misma que hace duelo por tu inesperada partida,
que te extraña, que te ama y que por todo lo que resta de cada una de nuestras vidas,
te tendremos enmarcado en el cuadro que nos dejaste de tu bien dibujada sonrisa en mi mente.
Adiós hermano mío, Adiós hermano nuestro, hijo del alma y padre de la esperanza por siempre..
HELIOS MAR
