Villa Olímpica, Ciudad Parque, Colombia | Noviembre 11 de 2017
Hora: 3:25 a.m. "Dedícalo a tu persona soñada"
Te llamaron María Emilia
y ante Dios y el mundo así fuiste bautizada,
el amor de tus padres lo llevas impregnado
en el cuadro perfecto de tu rostro,
cual manera de dibujar en abstracto
sobre el lienzo de tu piel,
colores vivos en tonos pastel,
entre rosado, púrpura, café
y algo de crema también.
Todo un arcoíris entre montañas
de un impetuoso paisaje soñado, esperado,
como si se hubiera diseñado
para la mejor de las galas
en un gran concierto de música para tu vida,
la de ellos, o tal vez la mía.
Eso realmente no lo se,
solo empiezo por atreverme a escribirte
sin pretender alagarte para conquistarte,
o tal vez si?
eso realmente no lo se,
tú y yo algún día
podríamos discutirlo sin planear,
dialogar un poco del poder amar.
Me divierto en poder observar
como creces impetuosa, transparente,
humilde, conservadora y ante todo
como una gran persona.
Trasmites ensueños, esperanza,
paz interior, amor, mucho amor,
eso si que brota con tan solo verte
sin que pudiera tenerte aquí cerca, de frente.
Acaecido en mi mundo
mil y una situación entrañable
por no permitirme en este momento
poder llegar a ti,
expresarte mis sentires, añoranzas,
manera de pensar, vivir el mundo,
poder admirarte, o quizás amarte,
te presiento sin tenerte, poder hablarte.
Te confieso no sentir miedo
y mucho menos rechazo a esto,
los estigmas y las locuras morales
de los tiempos, formas y maneras de pensar,
me despreocupan, es solo eso:
Un sentimiento único
que llevo por dentro,
trasciende de generación en generación
como si estuviera esperando por ti en años luz,
me amilana tanta fuerza sobre natural
que pudiera a veces esperar,
dejarte llegar,
la pieza en este rompecabezas,
un punto de luz resplandeciente
en ese inhóspito universo sideral,
al cual debo llegar,
tomarte de la mano,
expresarte mi amar
y enseñarte a ver mas allá.
Tú y yo, debemos hablar,
conversar,
ponernos de acuerdo y conciliar;
las barreras terrenales
no nos pueden alejar;
seria inaceptable, algo triste y melancólico, brotaría una lagrima,
se apagaría nuestro avatar,
una cinta cinematográfica,
¿como la vez?, sin un bello final.
Nos permitimos amar sin pensar,
arrúllame con tu mirar,
ese mismo que al solo observar
me deleita, me hace suspirar,
me invita a amarte de verdad.
María Emilia,
gracias por permitirme acercar,
llegar a ti
a través de esta,
mi forma de expresar,
entre frases, versos
y algo de magia sin pensar.
HELIOS MAR
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