RAUDO Y PACIENTE

Ana Mercedes - En el Sitio 

Agosto 3 de 2016 - Hora: 7:02 pm

Eres una mujer que inspiras situaciones alocadas, desenfrenadas, 

que lo adentran a uno a la lujuria

o manifestaciones de cenas inesperadas.

No creas que es por querer conquistarte

o permitirme hacerte pensar que estoy loco por ti,
más bien es por sentir que en realidad eso que siento, es por verte feliz.

Ayúdame a no dejarte ir,
y que esa sensación que en este momento siento por ti,

consentida de sensación feliz,
pueda yo ayudarte adentrarla en  mi,
permíteme llegar a ti, aquí, ahora y por el resto de mi existir.

No es justo liberar esa magia encantada

que nos envuelve en este instante de soledad temprana,
arropémonos en ella y disfrutemos el momento

que nos ayudará a sobrepasar

uno a uno los designios e instantes

en el mana de nuestros días por venir.

Esa noche de hoy,
como aquellas después,
se repetirán e irán siendo más intensas,
nos invadirán de tal forma
que auguraremos volverlas a sentir,

una y otra vez, una y otra vez,
no nos cansaremos,  ¡ole! y ¡ole!,

bailaremos al ritmo flamenco que nos toquen,

danzaremos a un ritmo ancestral que trascenderá en constelaciones,
volveremos a nacer

y seguiremos en movimientos de bailarines compenetrados

en el mejor de sus conciertos.

¡Oye como suenan! las olas y el viento,
aplaudiendo en un solo estruendo,

luces, colores y centelladas de locura
que concuerdan en esta gran noche de gala,

copas, champán y vinos de altura,
lo que quedó pendiente,
hoy se cumplió, raudo y paciente.

HELIOS MAR